miércoles, 21 de noviembre de 2012


LA EVANGELIZACION AL ESTILO DE JESÚS




Esta lectura nos da a conocer que la evangelización no es una guerra ya que la mayoría de bautismos son como trofeos, debería ser una preocupación por quienes Cristo murió. El amor por la gente debe ser lleno de claridad. Un caso  de método de evangelización, el primero es el de las bodas de Canaán, Jesús abordo las necesidades de la gente. Al igual también del paralitico en Betesda.
Cristo  orientó primeramente su ministerio a las necesidades físicas del hombre, al igual que como alimento a cinco mil personas, él se fijó en las necesidades que se encontraba la gente.  La evangelización no es como una guerra, en la que cada bautizado es un trofeo, la evangelización en el más elevado de sus sentidos es una preocupación para los seres humanos. Cristo fue muy perspicaz, su ministerio giraba alrededor de las personas y sus necesidades. Cristo primeramente surgía sus necesidades y luego sometía a los hombres al poder transformador de la verdad, mostrándole el amor de Dios y su gran poder. Cristo conocía a los corazones de las personas y satisfacía las necesidades de la gente.




Apreciación  Crítica

Cristo  nos dejó un buen ejemplo de cómo evangelizar,  y es la manera más adecuada ya que nos permite entran en confianza con las personas y ellas abrirán su corazón. Ya que a veces  encontramos  personas difíciles de entrar, y es ahí donde podemos aplicar el modelo de Jesús para ganar corazones para Cristo. Cuando evangelizamos debes surgir las necesidades de la familia, las necesidades de bienestar físicas, necesidades de seguridad económica, necesidades de seguridad para el futuro, para poder entrar en confianza y poder  evangelizar.
Hoy el mundo necesita de nuestra ayuda, hay mucha gente que está sedienta de Cristo con necesidades, pero muchas veces  ellas no abren el corazón fácilmente, es ahí donde el cristiano debe abordar ofreciéndole confianza y surgiendo sus necesidades. Este estilo es muy delicado ya que cualquier paso en falso puede degradar la confianza que te dio dicha persona y si se rompiese esa confianza por más que se intente recuperar ya no va a ser la misma.
Cuando Cristo vuelva por segunda vez, el se sentirá contento por nuestro trabajo y nosotros teniendo las herramientas necesarias, si podemos hacerlo pero muchas veces no lo estamos haciendo, poner a Dios en primer lugar es la prioridad de todo cristiano que ama verdaderamente a Dios.